La capacidad de los niños de gestionar sus emociones y relacionarse de manera satisfactoria con su entorno es fruto de sus experiencias tempranas y del aprendizaje. A esta capacidad la llamamos Inteligencia Emocional. Estas habilidades aprendidas en la infancia ayudarán al niño en su juventud y adultez y no solo en el ámbito emocional sino también en el académico y laboral.Con el objetivo de enseñar de una manera divertida y amena las diferentes...