Hablar de danza como forma de conocimiento, demanda pensarla más allá de la estética, más allá de las poéticas del escenario, para buscarla también en la vida social y colectiva; donde la danza, el baile, le devuelve el sentido a la vida, renueva los vínculos en el afecto y arma nuevos derroteros en el encuentro y el abrazo acompasado, donde no somos solo uno, sino dos, y en el mejor caso, muchos en la fiesta. Construir un currículo acerca del ar...