El encuentro amoroso es, de alguna manera, un viaje hacia la intimidad de otro ser humano. Una odisea en la que cada mirada, abrazo, beso o caricia va aproximándonos a un territorio maravilloso tanto más codiciado cuanto distante a nuestro anhelo o nuestro deseo. Y en esa búsqueda, repleta de presagios y descubrimiento, cada amante asume o descubre miles de formas para saciar sus apetitos, y se extasía con el aparecer de criaturas fantásticas esc...