La muerte del padre, cuando Rulfo tiene apenas seis años cumplidos, y la muerte de la madre, cuatro años después, marcará para siempre la vida del escritor, recluido cuando niño en un orfanato de Guadalajara (México). La obra rulfiana, breve pero prodigiosa, está inmersa en este negro vacío de la ausencia. El escritor nace la noche aciaga del asesinato del padre. La muerte como sueño iniciador de escritura. La realidad es para Rulfo algo difuso q...