Este texto fue inspirado por el mismo, Pierre Teilhard de Chardin (1881-195S). Ya que en las primeras páginas de su diario entre las trincheras de la Primera Guerra Mundial, el 8 de marzo de 1916, él resumía la esencia misma de su pensamiento afirmando: la mayoría de mis ideas se podrán agrupar bajo un título como este: la búsqueda del absoluto en el mundo. Ya desde su infancia, Teilhard de Chardin se había orientado instintivamente hacia el objeto primordial de la vocación de su vida. No todos los niños se angustian al ver la facilidad con la que el fuego destruye un poco de sus propios cabellos, es decir, al constatar la fragilidad de su propio cuerpo, de su propio yo. Y serán también poquísimos los que hayan llorado amargamente al descubrir la presencia, lenta pero constante, de la herrumbe que destruía el trozo metálico que, por su solidez y fortaleza, se había constituido para su mente infantil en una especie de cristalización de lo que dura, de lo que resiste, en un intento de refugio definitivo ante la inexorabilidad de la desintegración y de la muerte. El eclipse del Dios-hierro" fue el inicio de un esfuerzo constante en la búsqueda de una verdadera durabilidad y consistencia, de la síntesis entre la fe en Dios y la fe en el mundo. Búsqueda que habría de prolongarse hasta el último instante de su vida. En estas páginas los autores quieren presentar el resultado de esa búsqueda.Ya desde su infancia, Teilhard de Chardin se había orientado instintivamente hacia el objeto primordial de la vocación de su vida. No todos los niños se angustian al ver la facilidad con la que el fuego destruye un poco de sus propios cabellos, es decir, al constatar la fragilidad de su propio cuerpo, de su propio yo. Y serán también poquísimos los que hayan llorado amargamente al descubrir la presencia, lenta pero constante, de la herrumbe que destruía el trozo metálico que, por su solidez y fortaleza, se había constituido para su mente infantil en una especie de cristalización de lo que dura, de lo que resiste, en un intento de refugio definitivo ante la inexorabilidad de la desintegración y de la muerte. El eclipse del Dios-hierro" fue el inicio de un esfuerzo constante en la búsqueda de una verdadera durabilidad y consistencia, de la síntesis entre la fe en Dios y la fe en el mundo. Búsqueda que habría de prolongarse hasta el último instante de su vida. En estas páginas los autores quieren presentar el resultado de esa búsqueda.El eclipse del Dios-hierro" fue el inicio de un esfuerzo constante en la búsqueda de una verdadera durabilidad y consistencia, de la síntesis entre la fe en Dios y la fe en el mundo. Búsqueda que habría de prolongarse hasta el último instante de su vida. En estas páginas los autores quieren presentar el resultado de esa búsqueda.En estas páginas los autores quieren presentar el resultado de esa búsqueda.