La caja es una fábula del azar nacional, cualquiera te monta hoy una película por asalto o en amor de telenovela, se enamora de tu pellejo y ahí tienes tu secuestro, eres la película y el muerto de la hora. Lo abstruso es que ruedas una película que ni conoces, ruedas las bomba o granada que encuentras por ahí como sobrando de guerra, te ponen a cargar el muerto que no mataste o transportas el matute y haces el mandado de humo al patrón más cotiz...