Al parecer la comida que consumimos no es colores por casualidad aunque constituyen un auténtico regalo de la naturaleza. La dieta del arcoíris se basa en que los pigmentos encargados de dar color a cada alimento tienen un efecto benéfico y específico para la salud, por lo que al consumir diariamente frutas, las hortalizas y verduras frescas de diversos colores, se garantiza la ingesta de amientos de bajo aporte calórico y alta cantidad de mucron...