Hay una energía impulsora que te da la fuerza y la determinación necesarias para llevar a cabo un propósito o hacer un sueño realidad. Además esta energía tiene otro aspecto: te dirige para estar en armonía con tu proyecto divino original. Una faceta más de ella es que te aporta la capacidad de guiar a otros en mayor o menor grado. Y la característica más interesante: te protege a ti y a tu familia de peligros físicos, emocionales, mentales e inc...