Hacía casi dos años que Lisey Debusher había perdido a su marido Scott, después de veinticinco años de matrimonio y de una intimidad tan profunda que a veces le daba miedo.Scott había sido un escritor muy premiado y de gran éxito y también un hombre muy complicado. Al principio de su relación, Lisey tuvo que aprender mucho de él sobre los libros, sobre sangre y sobre dádivas, esas maléficas travesuras. Más adelante supo que había un lugar donde S...