«Si Joyce es Irlanda y la lengua inglesa, y Proust Francia y la lengua francesa, Thomas Mann es más que Alemania y la lengua alemana», Carlos Fuentes Un sanatorio para tuberculosos en medio de los Alpes puede ser el mejor sitio para la iniciación intelectual y erótica de un joven ingenuo en la Europa decadente a las puertas de la primera guerra mundial. Sentados en sus tumbonas, ajenos al transcurrir del tiempo, un puñado de personajes tan dispa...