«Si uno quiere a Cuba —o si es cubano, y lo lleva en su sangre— habrá que leer La tribu, porque hay algo de magia en estas páginas. Pero no es una magia inventada. Acá está la Cuba que existe de verdad. Acá está la Cuba que perdura, la querida, la triste y la aborrecida, la de los versos de boleros y ahora de reggaeton, la que es para siempre, se quiera o no. Los lectores volverán a darse cuenta, si es que lo llegaron a dudar, que a pesar de todo...