Robert Iger se convirtió en CEO de la Walt Disney Company en 2005 durante un momento difícil para la empresa. La moral se había deteriorado, la competencia era intensa y la tecnología estaba cambiando más rápido que en cualquier otro momento de la historia. Su proyecto de futuro se basaba en tres ideas muy claras: renovar el compromiso con la importancia de la calidad, integrar la tecnología en lugar de luchar contra ella y pensar con ambición y ...