A mediados de la década de 1930 a 1940, casi un cuarto de la población de Tobia (Cundinamarca) murió como consecuencia de una infección bacteriana trasmitida por garrapatas; se trataba de , la misma bacteria causante de la fiebre manchada de las montañas rocosas. Desde ese momento hasta nuestros días, el instituto Nacional de Salud investigó algunos casos aislados de esta enfermedad en otras regiones del país. La enfermedad desapareció de las age...