Magdalena Huertas, viuda de Godoy, unas horas antes de su muerte, le pide a su nieta Mariana que investigue a dónde fue a parar el legado político de Laurentino y Leonardo Godoy, padre e hijo.
En cumplimiento de esa misión, adelanta una encuesta entre académicos, periodistas, obispos, presidentes de gremios económicos y políticos activos. El noventa y cinco por ciento de los consultados le dice que la doctrina de los Godoy está en la cabeza Libo...