El lugar donde habitamos no está formado solo de imágenes espaciotemporales, sino de vida sintética. La percepción humana se ha transformado por una inmersión que tiene lugar en diferentes organismos artificiales, lo que permite la experimentación en entornos conformados por especies nuevas que interactuán entre ellas y con nosotros. Estos son los mundos bioinmersivos, que proceden de la intersección entre los mundos virtuales y la vida artificia...