La actitud generalmente ingenua de las gentes y de los quietos o estancados escenarios académicos, suelen asumir que la calidad de una obra literaria está en directa proporción a la presencia o exposición mediática que se haga de ella. Para dicha mirada ingenua, calidad es igual a insistencia propagandística o publicitaria. Aunque, en efecto, se da también el caso de obras muy meritorias que reciben el favor de los medios especializados o de cier...