Desde siempre la humanidad ha pretendido guardar la memoria de los hechos pero sobre todo destacar aquellos acontecimientos más importantes o de mayor impacto en su vida diaria. La prueba la hallamos en esas antiquísimas fuentes de la historia, en las huellas rupestres primero, en las actas regias después, en las memorias imperiales luego y por fin en las publicaciones periódicas así como en los diarios individuales o en las anotaciones científic...