Ante la tragedia del suicidio de un ser querido no hay que juzgar S243lo acompa241ar En 1983 Abel Posse se enfrent243 a un suceso altamente traum225tico Viv237a entonces en Par237s con su esposa y su hijo Iv225n Un domingo cualquiera el matrimonio sali243 de su domicilio para comprar un regalo para un amigo a su regreso se encontr243 con lo indecible el suicidio del hijo Tuvieron que transcurrir tres d233cadas para que algo se removiera en su int...