El ser humano no puede separarse de la biodiversidad. Nuestras funciones vitales y nuestra salud están inmersas en las sinergias con otras especies; de hecho, es mayor la cantidad de microorganismos con los que convivimos que la de nuestras propias células. Por eso, desligarse de la biodiversidad es la mayor amenaza contra la supervivencia humana, así como el modelo de desarrollo actual que afecta adversamente nuestro soporte vital. Para entender...