Pocos años antes de su suicidio Virginia Woolf intentó, más que escribir su biografía, grabar su vida en la memoria. En seguida dio cuenta de que la visión de conjunto se le escapaba. Afloraban en su mente impresiones de sonidos y de imágenes, sensaciones auditivas y táctiles que se remontaban a su infancia. En cuanto a los recuerdos, ya no eran suyos: pertenecían a los personajes de sus novelas.Sólo Nadia Fusini, eminente estudiosa e intérprete ...