Silencios que matan. Narrativas de la violencia sexual en cuerpos racializados es un libro pertinente y necesario. Requerimos de trabajos como este que incluyan la raza y la etnicidad como elementos analíticos de la violencia sexual que se ha ejercido sobre niños, niñas, adolescentes y mujeres afrocolombianas. Necesitamos que se señalen los vacíos existentes en la gestión pública del registro, prevención, protección y atención de esta violencia. Precisamos romper el silencio, el mutismo y ceguera institucional en relación con las múltiples opresiones que se imbrican en este flagelo, con sus singularidades [Mara Viveros Vigoya y Franklin Gil Hernández].