Es una queja que se oye con demasiada frecuencia:«¡No tengo tiempo!».Vivimos en una cultura con hambre de tiempo.A medida que el ritmo de vida se acelera,la respuesta de la persona equilibrada es no seguirlo,sino frenarse,hacer una nueva valoración y dedicarse más a lo que tiene sentido y menos a lo que provoca tensión.Odette Pollar tiene la solución para crear una vida más equilibrada...