Como maestra e investigadora siempre llevo presente mi misión: posibilitar la transformación de las personas, de manera especial la de los niños y niñas en quienes intento potencializar sus mentes, avivar sus corazones y desde luego, sembrar alegría, confianza y autodeterminación, por ello en mi recorrido como formadora he encontrado en el escenario pedagógico algunas situaciones que han llegado a preocuparme y frente a las cuales me atrevo a sugerir miradas y caminos distintos en las líneas de este libro, intento posibilitar la reflexión, la intención jamás se enfoca en la crítica sin argumentos y al desconocimiento de la labor exigente y apretada que atravesamos los maestros. El propósito es hacer posible el análisis de situaciones cotidianas en el aula que han asumido como normales y adecuadas, pero que varias de ellas tienen un trasfondo, que sin notarlo atentan contra el niño, al no ser respetado como sujeto epistémico, simbolizante, emocional, social, lúdico, creativo y libre.