El propósito central del libro es el de sugerir los lineamientos de una teoría de la justicia que resulte apta para aplicarse al mundo real. Se trata de una teoría liberal, que recomienda a la vez reducir drásticamente el tamaño del Estado, y mantener, sin embargo, un esquema de redistribución de recursos, lo que permitiría crear un Estado mínimo de bienestar. Comienza con un estudio de los límites que deben gobernar la aplicación del derecho extranjero. Explora luego el problema de la igualdad de oportunidades, y recomienda que la solución exceda una simple igualdad formal y se comprometan algunos recursos de la sociedad para promover una igualdad sustantiva de oportunidades. Analiza el tema de la pobreza, la que interpreta como una propiedad y no como una relación: es pobre aquel que no puede satisfacer sus necesidades básicas. Recomienda que el ataque a la pobreza se lleve a cabo desentendiéndose del problema aparente que plantea la brecha que existe entre ricos y pobres. Estudia a continuación las dificultades que el velo de ignorancia rawlsiano enfrenta en aquellos casos en los que debe aplicarse al mundo real. El libro cuestiona en todo momento el espíritu imperialista de la justicia distributiva, que invade áreas que le son ajenas. Explora entonces el ámbito contractual, aplicando principios de justicia correctiva, y el ámbito del castigo, aplicando principios de justicia punitiva. Finalmente, se ocupa del campo de la convivencia familiar, y muestra que tampoco allí pueden aplicarse sin más los principios de una teoría de la justicia distributiva.Comienza con un estudio de los límites que deben gobernar la aplicación del derecho extranjero. Explora luego el problema de la igualdad de oportunidades, y recomienda que la solución exceda una simple igualdad formal y se comprometan algunos recursos de la sociedad para promover una igualdad sustantiva de oportunidades. Analiza el tema de la pobreza, la que interpreta como una propiedad y no como una relación: es pobre aquel que no puede satisfacer sus necesidades básicas. Recomienda que el ataque a la pobreza se lleve a cabo desentendiéndose del problema aparente que plantea la brecha que existe entre ricos y pobres. Estudia a continuación las dificultades que el velo de ignorancia rawlsiano enfrenta en aquellos casos en los que debe aplicarse al mundo real. El libro cuestiona en todo momento el espíritu imperialista de la justicia distributiva, que invade áreas que le son ajenas. Explora entonces el ámbito contractual, aplicando principios de justicia correctiva, y el ámbito del castigo, aplicando principios de justicia punitiva. Finalmente, se ocupa del campo de la convivencia familiar, y muestra que tampoco allí pueden aplicarse sin más los principios de una teoría de la justicia distributiva.El libro cuestiona en todo momento el espíritu imperialista de la justicia distributiva, que invade áreas que le son ajenas. Explora entonces el ámbito contractual, aplicando principios de justicia correctiva, y el ámbito del castigo, aplicando principios de justicia punitiva. Finalmente, se ocupa del campo de la convivencia familiar, y muestra que tampoco allí pueden aplicarse sin más los principios de una teoría de la justicia distributiva.