Esta no es una historia del ser Caribe autentico. Es, más bien, un cuento de la ambigüedad que genera la globalización. Desde un punto de vista se prefiere y apoya al caribe autóctono, folclórico, nostálgico, mamagallista y soñador. Ponderar entre las tradiciones impuestas y las costumbres raizales, entre la cultura y la civilización arrolladora de la aldea global, entre los nuevos valores y los principios de los abuelos, entre la tradición oral ...